Barcelona y los cruceros
Durante todo este mes de agosto la prensa ha informado acerca de los problemas que la saturación turística produce en las ciudades. Concretamente en Barcelona la polémica está servida ya que existe la voluntad del Ayuntamiento de la Ciudad Condal de limitar y regular el crecimiento turístico en determinados barrios para evitar un crecimiento insostenible. Una de las medidas que se van a incluir en el nuevo plan estratégico turístico es limitar del número de cruceros que atracan en Barcelona.
El argumento de la concejal de Ciutat Vella, Gala Pin, es que el uso intensivo del espacio público es muy grande y los beneficios de dicha ocupación no compensan a la mayor parte de los residentes en las zonas con mayor afluencia de turistas, la Barceloneta y la misma Ciutat Vella, provocando problemas de convivencia entre turistas y residentes. Con esta medida (entre otras) el gobierno municipal pretende evitar la saturación para desarrollar una actividad turística responsable y respetuosa que pueda convivir y compartir espacios con la población local. De todas formas cabe destacar que los últimos datos sobre el impacto de los cruceros en la ciudad de Barcelona parecen quitar razones al gobierno municipal de Barcelona en Comú. S
egún un estudio realizado por la Universidad de Barcelona la industria del crucero aportó a Barcelona 796 millones de euros durante el año 2014. Los cruceros generan más de 6000 puestos de trabajo en la ciudad y las rentas fiscales derivadas de esta industria ascienden a 152 millones de euros cuyo 75% se reparten entre las diversas administraciones que participan en el negocio (impuestos estatales, autonómicos y municipales). Este impacto se extiende a todo el territorio ya que se estima que el impacto generado para el resto de Catalunya es de 413 millones de euros. El año 2014 llegaron a la ciudad 764 barcos y transportaron a 2,36 millones de pasajeros. El 18% de estos cruceristas no durmieron ni visitaron la ciudad, el 57.5% no durmieron pero la visitaron y el 23,9% la visitaron y durmieron una media de 2,6 noches en Barcelona. Estas cifras convierten a Barcelona en el primer puerto de cruceros de Europa. Habrá que seguir las noticias y esperar a que se haga público el plan estratégico para ver en qué quedarán estas medidas y en cómo afectará al negocio turístico de la Ciudad Condal.

Departamento de Recursos Turísticos y Turismo